Cuando hablamos de llevar una alimentación sana y equilibrada, y comer de forma saludable, instintivamente todos pensamos en llevar una dieta concreta, ingerir una serie de cosas y controlar las cantidades. Pero, ¿y si te dijera que la forma en la que masticas los alimentos influye directamente en tu salud?
Cuando vemos a un niño pequeño comer podemos observar -en la mayoría de los casos-, cómo los alimentos se mantienen durante bastante tiempo en su boca. Esto es algo completamente instintivo, que absolutamente nadie les ha enseñado.
Por el contrario, si observamos cómo ingiere alimentos una persona adulta, vemos cómo le invade la prisa, y la forma en la que los alimentos pasan de su boca a su esófago a una velocidad de vértigo.
Lo cierto es que los adultos comemos, por norma general, demasiado rápido. Rara vez mantenemos en la boca el alimento lo necesario como para poder digerirlo de la forma más óptima y esto, a la larga, puede tener consecuencias negativas en nuestra salud debido a que no es una forma correcta de masticar bien los alimentos.
El metabolismo de los alimentos tiene lugar en primera instancia en nuestra boca, dado que las papilas gustativas, los dientes, la saliva, etc., tienen una serie de funciones muy importantes. De alguna forma, se encargan de preparar el alimento de la mejor forma posible para su correcta asimilación.
¿Por qué masticar bien los alimentos?
Para que los alimentos se digieran de forma correcta en nuestro organismo, son necesarias unas sustancias llamadas enzimas que, por suerte, son producidas por nuestro cuerpo en cantidad más que suficientes.
Las enzimas son catalizadores bioquímicos que aceleran todos los procesos de nuestro organismo. Se encargan de que asimilemos mejor los nutrientes y que estos nos aporten todos los beneficios posibles.
Existen diferentes tipos de enzimas producidas por nuestro cuerpo. La saliva, sin ir más lejos, produce una llamada ptialina, que se encarga de descomponer los carbohidratos. La importancia en este caso de masticar bien los alimentos, es la de producir suficiente saliva para que rodee al alimento y pueda obtener estos nutrientes perfectamente.
Como es lógico, si el alimento pasa muy poco tiempo en nuestra boca, no daremos tiempo a generar saliva suficiente; por lo tanto, la ptialina no actuará correctamente y haremos que nuestro organismo trabaje de forma poco óptima.
La saliva ayuda de la misma forma a crear lo que se conoce como bolo alimenticio, además de activar las papilas gustativas para descomponer el alimento como tiene que hacerse.
Las consecuencias de esto se traducen en una digestión mucho más pesada, una peor asimilación de los hidratos de carbono y un más que probable aumento de peso a largo plazo. De la misma forma, no masticar bien los alimentos hará que no separaremos correctamente los nutrientes de las toxinas, con lo cual intoxicaremos nuestro cuerpo y favoreceremos su desnutrición.
Pero, ¿qué beneficios me aporta masticar correctamente?
En el caso de que una buena digestión y no intoxicar tu cuerpo no te parezcan motivos suficientes como para empezar a masticar bien tus alimentos, no te preocupes, aquí van otra serie de beneficios de masticar bien:
- En primer lugar, el más evidente, la comida es algo delicioso que debemos disfrutar al máximo. Masticar bien aumenta el tiempo del alimento en la boca y…maximiza el placer.
- Por otra parte, cuando masticamos generamos mucha saliva, la cual es completamente imprescindible para nuestra salud bucal. Hace que los alimentos no se peguen a los dientes y aporta importantes funciones antibióticas.
- Masticar abundantemente oxigena nuestro cuerpo y nos aporta una sensación de bienestar que aplacará nuestra prisa y nuestro estrés; consiguiendo que nos relajemos y que nos sintamos mucho mejor.
- Quizá la ventaja más llamativa es que, según diversos estudios nutricionales, cuando masticamos poco aumentamos enormemente el riesgo de tener sobrepeso y obesidad. El mejor y principal truco para adelgazar, como ya hemos visto, es masticar bien nuestros alimentos.
- Masticar mucho aumenta la sensación de saciedad de nuestro cuerpo, con lo cual acabaremos comiendo menos. Otra ayuda más para adelgazar, lo que supone una ventaja muy llamativa para cualquier persona.
¿Cómo masticar despacio?
El primer consejo y quizá el más importante para masticar bien los alimentos y despacio es estar pendiente, al menos al principio, de lo que estamos haciendo. Podemos probar, casi a modo de juego, a masticar treinta veces cada bocado.
En segundo lugar, algo que nunca debemos hacer es meternos grandes cantidades de comida en la boca, acrecentando así la necesidad de tragar. Con bocados pequeños es más sencillo que mastiquemos mejor.
Con estos consejos, nos será mucho más sencillo masticar bien y disfrutar de los alimentos y del placer de comer. Esperamos que te ayude y que mejore tu salud y tu bienestar.
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